Tortuga Hicotea

LA IMPORTANCIA  DE PRESERVAR LA TORTUGA HICOTEA

La tortuga hicotea es una especie representativa de las ciénagas del Caribe entre Colombia y Venezuela, se le encuentra en ambientes fangosos y poco profundos, por lo general quietos con gran cantidad de vegetación acuática para alimentarse.

La especie hicotea emprende una lucha desde su nacimiento. Los tortuguillos se enfrentan a diferentes depredadores: peces, babillas, aves y, desafortunadamente, son amenazados por los humanos, por vía del tráfico, vendidos como mascotas, esto ocasiona que disminuya la posibilidad de llegar a la edad adulta impidiendo su reproducción. Otra importante amenaza es que algunos habitantes de Córdoba la usan como alimento. También podemos ver la reducción de su hábitat por distintas causas como el crecimiento de los niveles de los ríos y la degradación del mismo.

La importancia cultural de la tortuga hicotea es antiquísima, los pueblos nativos de la región Caribe le han rendido culto a esta especie, ya que la consideran portadora de gran energía otorgando longevidad y su caparazón es utilizado como amuleto de la buena suerte.

Con la integración de los habitantes de Las Palomas y Purísima Concepción al proyecto, son ellos, la misma comunidad, los que han pedido participar en los procesos de conservación de estas especies.

El cuidado y conservación de la biodiversidad es una tarea de todos, ya que los seres humanos dependemos de hábitats sanos, que también contribuyen en que nuestra especie pueda coexistir en armonía con la naturaleza, es nuestra responsabilidad apoyar estas iniciativas para que las futuras generaciones aprendan a aprovechar los recursos de la mejor manera.

El camino hacia la libertad de la tortuga no ha sido fácil, ha tenido que superar obstáculos desde su proceso de incubación, sus huevos son apetecidos por varios animales como el zorro, aves rapaces y lobos polleros que depredan los nidos, en algunos casos, cuando logran pasar desapercibidos por los depredadores astutos, los huevos pueden sufrir de infestación por hongos, hormigas o larvas. Desde ya comienza una lucha desesperada de los tortuguillos por evadir ese ambiente hostil, que parece que la naturaleza premiara con ese fuerte caparazón que lo cobija. Esa lucha constante a las que son sometidas las tortugas, ha sido objeto de investigación por parte de diferentes investigadores  de la Fundación Omacha, que han hecho grandes esfuerzos por educar a la población, en las respectivas etapas de crecimiento de las tortugas, es por eso que, en El Campano, municipio de Lorica, se convocó a diferentes representantes de asociaciones de pescadores y líderes sociales que fueron previamente sensibilizados y capacitados en la conservación de la tortuga hicotea.

La actividad consistió en un programa comunitario de incubación artesanal de huevos de hicotea, en el que participaron 45 personas.

Desde el inicio de 2018 se realizaron distintos talleres y capacitaciones con los pescadores, el objetivo era orientarlos en el uso sostenible de la hicotea, por lo que se les capacitó en la incubación artesanal de los huevos y se realizó su posterior liberación el 19 de julio de 2018.

120 tortuguillos fueron enviados a su hábitat natural para seguir con su ciclo natural en el Complejo Cenagoso del Bajo Sinú, un momento emotivo para la comunidad que participó, pues es comprender la lucha y complejidad que tiene el proceso de eclosión de las tortugas y su supervivencia.

Los resultados de este proceso de incubación y posterior liberación llevaron a un acto reflexivo de la comunidad, que si bien, el camino de la tortuga para llegar a la edad reproductiva se ve estancado por la cantidad de depredadores que lo acechan, son los mismos ciudadanos los que impiden el crecimiento de esta especie, debido a la contaminación causada por el hombre, quemas provocadas y el pisoteo por el pastoreo del ganado, son los obstáculos mayores a los que se enfrentan las tortugas, pues impiden el desarrollo natural de las especies.